Como parte de la actividad, se organizó una dinámica especial en la que participaron tanto adultos como niños, formando cuatro grupos intergeneracionales. En cada uno de estos grupos, se dramatizó un caso de acoso escolar, permitiendo a los niños y adultos ponerse en la piel de los personajes y experimentar de manera vivencial las emociones y dificultades que enfrentan las víctimas. Posteriormente, se llevó a cabo un espacio de reflexión en el que todos los participantes compartieron cómo se sintieron durante la dramatización, fomentando un diálogo abierto y sincero sobre la importancia de la empatía, el respeto y la intervención en situaciones de acoso.
Para finalizar, cada niño recibió un pequeño detalle como muestra de reconocimiento por su participación y compromiso en la actividad. La jornada culminó en un ambiente cálido y amigable, compartiendo dulces y buenos deseos, en un acto que fortaleció los lazos entre los asistentes y promovió valores de solidaridad y comprensión.
Esta iniciativa del Club de Lectura Miguel Vallés no solo ha permitido profundizar en una temática tan relevante como el acoso escolar, sino que también ha contribuido a sensibilizar a la comunidad, promoviendo una cultura de respeto y apoyo mutuo entre todos sus miembros.
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